«Hasta que lo inconsciente no se haga consciente, el subconsciente, seguirá dirigiendo tu vida y tú lo llamarás destino”

Carl Jung 

El liderazgo no es un lugar al que se llega, no es la cima de la montaña como muchos los pintan. El liderazgo es servicio, es una forma de vida, es ser intencional. Nos invita a vivir desde la conciencia. Eso implica conocernos profundamente, definir una visión y entender que la vida no es lineal, ni todo color de rosa.

Debo asumir responsabilidad radical sobre quién soy y cómo gestiono las diferentes situaciones de vida. Eso es lo que determina si salgo victorioso o no de los retos, porque aun cuando la situación no tenga el resultado esperado, si aprendo la lección y la incorporo en mi vida, fue GANANCIA. Eso determina también si podré guiar al equipo a lograr la visión.

Autoconocimiento ¿Cómo saber quién soy?

Antes de definir mi visión personal o del negocio, debo entender quién soy, cuál es mi propósito en la vida, cuáles son mis valores.

Para conocernos debemos explorar nuestra vida desde diferentes ángulos. También es necesario observar cómo nos comportamos ante diversas situaciones. ¿Cuándo fue la última vez que te detuviste y reflexionaste sobre eso? Espero que haya sido recientemente. Sino es así, hoy es el día perfecto para hacerlo.

Nuestras creencias, perspectivas, y en general, somos un reflejo de nuestra cultura, nuestra familia y el entorno que nos rodea. Sin embargo, aunque muchos de nosotros podemos ser parte de una cultura, del mismo país de origen o incluso de la misma familia, somos únicos y experimentamos el mundo de diferentes maneras. Tres hermanos de la misma familia tendrán experiencias diferentes basadas en las circunstancias en las que cada uno vive específicamente. Hay diferentes reglas en cada comunidad y familia donde crecimos. Algunas personas se vuelven más influyentes que otras, en nuestra vida, pero a partir de esas experiencias vamos formando y evolucionando nuestra esencia.

Debemos estar conscientes de que también reflejamos los sesgos presentes en nuestra familia y comunidad. Los sesgos son parte inherente de nuestra humanidad, es parte de nuestra naturaleza de sobrevivencia, juzgar situaciones, circunstancias y comportamientos de otros conforme a los paradigmas sobre los que crecimos y fuimos educados. Por eso, enriquecer la vida con experiencias en diferentes comunidades, países y experiencias en general, nos facilita dar la bienvenida a diferentes puntos de vista. 

El silencio es una buena herramienta, que nos ayuda a entender de dónde venimos, y cómo nos mostramos cada día al mundo. Es en nuestros momentos de silencio, cuando podemos reflexionar y reconocer nuestro trasfondo a profundidad. Conectar los puntos de por qué hay algunas cosas que son tan importantes para nosotros y otras simplemente irrelevantes, y no es lo mismo para todas las personas. Esos son momentos que nos dan el regalo de reconectarnos con nuestra esencia y nuestro origen.

En esta época, en la que estamos abrumados por el ritmo acelerado de la vida, la enorme cantidad de demandas y expectativas, es extremadamente importante crear y hacer espacio para el silencio. 

«El silencio es un verdadero amigo que nunca traiciona”

Confucio

Idealmente lo que decimos y pensamos está alineado con nuestros valores y visión de vida. Eso crea coherencia, mostrándonos cómo realmente somos. Cuando esa coherencia existe, somos plenos; de lo contrario, podríamos estar reflejando la versión falsa de otra persona y no nuestro verdadero ser. El mundo se estaría perdiendo del valor único que podemos y somos llamados a entregar.

Incluir una práctica, para encontrar esos espacios de silencio, fortalece nuestro liderazgo. Podría ser meditación, una caminata, una visita a un parque, una montaña, un lago, o la playa. Observa tu alrededor en silencio. 

«Hay una voz que no usa palabras. Escucha”

Rumí.

La práctica de la observación, no solamente te ayuda a conectarte con tu esencia, sino que también potencia la innovación y el fluido de nuevas ideas, para tu vida y el negocio.

Vivamos nuestros valores, fortalezas, pasiones y apalanquemos nuestro crecimiento en nuestras emociones

Valores: Los principios y estándares que guían nuestra vida. Por ejemplo: excelencia, autenticidad, colaboración, coraje, responsabilidad, servicio, libertad, justicia, etc.

Fortalezas: Las cualidades que le permiten a alguien enfrentar problemas o situaciones en una manera determinada y efectiva. Ejemplos: resiliencia, tolerancia, compostura, empatía, colaborador, flexibilidad, negociación, influencia, etc.

Pasiones: Las actividades, situaciones u objetos que producen un deseo intenso o entusiasmo. Usualmente, los pasatiempos son conducidos por pasiones, pero no necesariamente tenemos un pasatiempo para todas nuestras pasiones. Ejemplos: aprender, bailar, bucear, coleccionar arte, viajar, leer, servir, navegar, etc.

Emociones: El estado mental que se deriva de las circunstancias, del estado de ánimo o de las relaciones con las demás personas, típicamente acompañado por cambios fisiológicos y de comportamiento en el cuerpo. Las emociones y los sentimientos son diferentes. Suceden en diferentes partes del cerebro. La emoción es esa primera reacción y el sentimiento es cómo la emoción evoluciona en nuestra mente, cómo la experimentamos.

Antonio Damasio, profesor de neurociencia, psicología y filosofía en la Universidad del Sur de California y director del Instituto del Cerebro y la Creatividad, ha demostrado que las emociones desempeñan un papel central en la cognición social y la toma de decisiones.

Encuentra a continuación algunas de sus observaciones, que me parecieron útiles para aclarar el papel de las emociones en nuestras vidas:

  • “Los sentimientos son experiencias mentales de estados del cuerpo, que surgen a medida que el cerebro interpreta las emociones, y los estados físicos se originan a partir
  • de las respuestas del cuerpo a los estímulos externos. (El orden de tal evento es: estoy amenazado, experimento miedo y siento terror)”.
  • “No estamos pensando en máquinas que sienten; más bien, estamos siendo máquinas que piensan”.
  • “En lugar de ser un lujo, las emociones son una forma muy inteligente de conducir un organismo hacia ciertos resultados”.
  • “Cuando hablamos de emoción, realmente hablamos de una colección de comportamientos producidos por el cerebro. Puedes mirar a una persona en medio de una emoción y observar cambios en la cara, en la postura del cuerpo, en la coloración de la piel y así sucesivamente».

Ejemplos de emociones: deleite, orgullo, ansiedad, admiración, éxtasis, alegría, irritación, optimismo, etc.

Ahora que tomaste tu tiempo de silencio para reflexionar e identificaste tus valores, fortalezas, pasiones, emociones y cualquier otro comportamiento o rasgo que puedas resaltar como resultado de las influencias de tu comunidad o familia; ilustremos la imagen de quién eres HOY.

No solamente, saber quién eres hoy es suficiente. También es necesario reflexionar sobre el líder que quieres ser. Cuáles son esas características que quisieras que fueran parte de tus rasgos presentes y futuros.  Ese es el mejor regalo que le puedes dar al planeta, ya que no hay nadie que tenga tu perspectiva exacta, nadie que haya recorrido tu mismo viaje. ¡El mundo te necesita!

«Cuando tus valores son claros para ti, tomar decisiones se vuelve más fácil” 

Roy E. Disney